RCP (REANIMACION CARDIOPULMONAR) COMO REALIZARLA
Un infarto produce un paro cardíaco cuando la zona de miocardio lesionada es tan extensa que el corazón deja de bombear sangre. Se considera que una persona está clínicamente muerta cuando su corazón se detiene, pero es posible revivirla por medio de la Reanimación Cardio-Pulmonar (RCP), que consta de dos técnicas de salvamento básicas: respiración artificial para suministrar oxígeno a los pulmones, y compresiones de pecho para hacer circular la sangre. Si cree que alguien está sufriendo un infarto, primero pida auxilio médico y luego aplique la RCP de esta manera:
1 Coloque a la víctima boca arriba cuidando que no se lastime cabeza ni cuello, y despéjele la garganta, inclinándole la cabeza hacia atrás. Verifique durante 10 segundos si respira: ponga un oído sobre su nariz y boca, escuche y sienta si exhala, y observe si su pecho se eleva.
2 Si la persona no respira normalmente, pegue sus labios a los de la persona y, mientras le tapa la nariz con los dedos, insúflele aire en la boca dos veces. Suelte entonces nariz y boca y deje escapar el aire. Cada respiración debe durar un segundo y levantar el pecho de la víctima.
3 Compruebe que la persona está en una superficie firme y plana, y arrodíllese a su lado. Con las manos una sobre otra encima de su esternón, y los brazos extendidos en posición vertical, haga 30 compresiones fuertes con la base de la palma, dejando subir el pecho entre una y otra. Dele entonces dos respiraciones más.
4 Continúe con series de 30 compresiones y dos respiraciones de boca a boca hasta que la persona reaccione, lo releve alguien o llegue la atención médica.
1 Coloque a la víctima boca arriba cuidando que no se lastime cabeza ni cuello, y despéjele la garganta, inclinándole la cabeza hacia atrás. Verifique durante 10 segundos si respira: ponga un oído sobre su nariz y boca, escuche y sienta si exhala, y observe si su pecho se eleva.
2 Si la persona no respira normalmente, pegue sus labios a los de la persona y, mientras le tapa la nariz con los dedos, insúflele aire en la boca dos veces. Suelte entonces nariz y boca y deje escapar el aire. Cada respiración debe durar un segundo y levantar el pecho de la víctima.
3 Compruebe que la persona está en una superficie firme y plana, y arrodíllese a su lado. Con las manos una sobre otra encima de su esternón, y los brazos extendidos en posición vertical, haga 30 compresiones fuertes con la base de la palma, dejando subir el pecho entre una y otra. Dele entonces dos respiraciones más.
4 Continúe con series de 30 compresiones y dos respiraciones de boca a boca hasta que la persona reaccione, lo releve alguien o llegue la atención médica.
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